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La historia cuenta que el plato más icónico de Gandía nació en el mar, como corresponde a este municipio mediterráneo en el que el mar se siente en cada esquina. La pesca de arrastre y sus barcas han sido uno de los motores económicos tradicionales en este rincón de la costa valenciana, fue en uno de ellos, bautizado con el nombre de Santa Isabel, donde la falta de arroz para realizar una típica paella agudizó el ingenio del cocinero de la tripulación.
Todos los ingredientes estaban preparados. Había gambas, cigalas, rape y la morralla para hacer el caldo, sin embargo, no quedaba un grano de arroz. Entonces, desconociendo el impacto que tendría la ocurrencia, el encargado de la cocina decidió romper unos fideos de espagueti en trozos más pequeños y añadirlos a la preparación, creando una de las recetas más trascendentales de Gandía: la fideuá.
Tal ha sido el impacto de este plato que, desde 1974, se lleva a cabo en la localidad el Concurso de Fideuá de Gandía, donde los expertos ponen a prueba sus variantes, enriqueciendo el legado gastronómico. Existen varios restaurantes donde la fideuá es el plato estrella, pero aquí se detallan algunos donde el nivel de la receta alcanza un nivel excelso, amén de otros platos en los que la despensa gandiense despliega todo su potencial.
Este restaurante, ubicado en el barrio de Venecia, es toda una referencia de la localidad en estas recetas. Los hermanos Javier y Guillermo Pallarés hacen gala de su conocimiento sobre la cocina tradicional valenciana, una pasión aprendida de su madre, Bienvenida, en un espacio en el que los arroces y la fideuá son los platos más demandados.
Tal y como detallan, “la clave es hacer un buen caldo de pescado”, una tarea para la que la lonja de Gandía se destapa como la mejor opción para encontrar la materia prima. Herederos de las enseñanzas de su abuela, su fideuá se sirve con gamba, calamar y mollitas de pescadilla, un plato que, sin duda, sabe incluso mejor en la terraza del restaurante.
‘CASA JULIA’ - Plaça del Pou, 1. Tel. 647 69 84 63.
Al igual que en el anterior, aquí se respira el aire hogareño en cada rincón. Abierto al público en 1929 y tras pasar por varias manos, entre las que se incluyen familiares del actual propietario, este local ha cambiado varias veces el foco de negocio a lo largo de su historia. En la actualidad, bajo la batuta de Salva Sanchís, ‘Casa Sanchís’ -también conocido como La Tulipa- es uno de los principales exponentes de la cocina valenciana en la ciudad con elaboraciones tan icónicas como el figatel, que sirven en formato hamburguesa, o las mandonguilles -una especie de albóndigas- de abadejo.
Otros clásicos de la carta son su ensaladilla rusa, que elaboran siguiendo una receta con cinco décadas de historia, o las cocas de dacs -cocas de maíz- de gamba con acelga o de atún con tomate y huevo. Su terraza en la calle Forn es el espacio privilegiado para degustar alguna de estas especialidades, pero conviene reservar con antelación.
‘CASA SANCHÍS’ - Carrer del Forn, 10. Tel. 962 96 51 14.
A pesar de tratarse de una vinoteca con una gran selección de referencias de la zona, lo cierto es que aquí se pueden probar algunos de los platos más apetitosos de Gandía. El arroz caldoso de pescado -elaborado con producto de la lonja de la ciudad- es una gran elección si se quiere disfrutar de una comida contundente.
En caso de decantarse por algo más ligero, la ensalada Mullaora, elaborada con tomate del Perelló, capellán, asadillo de verduras y vinagreta de aceite Finca la Micola (de la variedad alfafarenca), es una apuesta idela. También lo son su coca de embutido de Ontinyent o la ensaladilla marinera, en la que probar la pescadilla de lonja. Además, cuentan con un competente menú del día con el que afrontar la tarde en la playa con energía.
‘VINS I MES’ - Jesuitas, 3. Tel. 639 13 08 50
Se trata de toda una institución gastronómica en Gandía al tratarse de un negocio fundado hace más de un siglo, concretamente en 1882, cuando el bisabuelo del actual propietario, Raúl Llopis, abrió las puertas del local. Como no podía ser de otra forma, el pasado de la ciudad ligado a la familia Borgia ha encontrado su dulce reflejo en trenza borgiana y la borgeta, dos de los dulces más reconocibles de esta pastelería. Se trata de un dulce típico de Pascua -aunque la demanda les ha hecho vender estas especialidades todos los días-, en el que la masa de harina, huevos, aceite y levadura se rellena de cabello de ángel y nueces y, por encima, se añade una mezcla de almendra, huevos y limón rallado con la que recubren toda la trenza. Toda una delicia.
Una de las grandes ventajas que tienen estos dulces es su larga longevidad sin perder sus propiedades, una característica que las hace ideales para su venta online. Además, en el mostrador de la pastelería la delicà -el tradicional pan quemado valenciano, pero que rellenan con naranja, pasas, almendras y nueces- también acapara parte del protagonismo, que durante la Navidad comparte con la Casca de Reis (un dulce de mazapán), el roscón de Reyes y el panettone.
‘PASTELERÍA RAÚL’ - Av. d'Alacant, 17. Tel. 962 87 23 30.
Con una panorámica que quita el hipo al estar en el paseo marítimo, el ‘Restaurante Parsifal’ es uno de esos lugares donde la vista es uno de los complementos de la experiencia. Entre los platos más destacados se incluyen los arroces o fideuá (con diferentes versiones como la gandiense, la de bogavante o la de pato setas y foie) o sus guisos marineros, como el all i pebre de rape y gambas. Además, sus menús del día son estupendos después de pasar una mañana de playa.
En caso de buscar una muestra del potencial de la cocina valenciana, unas raciones de espencat y mojama, buñuelos de bacalao o su fritura de calamares, chopitos y pescadito pueden dar una idea de la riqueza que aporta el mar Mediterráneo a las mesas de Gandía.
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