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En este lugar cualquier tópico de la mayor de las pitiusas se convierte en un tributo a la buena vida y a los placeres mediterráneos. Vamos a buscarlos en la cara oeste de Ibiza, más allá de Sant Antoni de Portmany, donde nadie nos encuentre: al borde de los acantilados del Cap Negret.
“Cada noche que pasábamos por allí pensábamos que era un sitio muy especial”, cuenta Anadón. 'La Torre' (Solete Guía Repsol) es un hotel íntimo con alma de hospedería, como así se concibió en los años 50. Hace seis veranos los hermanos Anadón, más conocidos como Mambo Brothers, se hicieron con este alojamiento histórico del occidente ibicenco para empezar con una revolución slow y una idea clara: “mantener viva la esencia de los años sesenta, cuando venían bohemios, hippies y gente creativa a la isla”, añade el propietario. “Así, con unas hierbas ibicencas, empezamos a soñar”. Hace dos años un incendio truncó por unos meses este sueño que no tardaría en volver a renacer de sus cenizas. El resultado, lo encontramos hoy conduciendo la Vespa hasta el final de la Carretera del Cap Negret, entre fincas y pinares.
'La Torre' es más que un hotel y mucho más que el restaurante que le ha dado la fama. Hablamos de una oda a lo rústico y a las cosas simples (que no baratas) que alcanza su clímax al ocaso. Es en ese momento cuando acuden los fieles a uno de sus templos de referencia en la isla. Pero no corramos, que quedan muchas horas en el día.
Las mañanas en 'La Torre' empiezan con ritmo tranquilo, piano. El sol acaba de aparecer y poco a poco ilumina las 18 habitaciones que componen este conjunto de refinado aire payés. Detalles de madera destacan sobre el encalado de las paredes y butacas de mimbre y de ratán sobre los suelos de piedra en una sencilla composición decorativa donde la naturaleza tiene mucho que decir. No solo por el pequeño jardín mediterráneo que hace de puerta de entrada y de claustro entre las estancias, sino porque el complejo en sí está envuelto por un bosque de pinos y sabinas que lo recluye con el Mediterráneo, justo ahí delante.
El huésped de 'La Torre' cuenta con habitaciones dobles con balcón y vistas al mar o al pinar, habitaciones deluxe y suites con cama king size. Los precios varían. Desde los 50 euros de temporada baja hasta los 300 del alta. 'La Torre' es el primer hotel boutique de la marca Calma Hotels del Grupo Mambo.
El espíritu del hotel cambia con cada hora del día. Tranquilo e íntimo en la mañana, místico y agitado en la tarde y romántico y evocador en la noche. El ambiente distendido y bohemio de este lugar provoca que el tiempo pase a un segundo plano y solo quede lugar para la desconexión. Además del entorno, buena culpa de ello la tiene el equipo del hotel y del restaurante. En este último es donde todo pasa en 'La Torre' y donde se sirven desayunos, comidas y cenas en una propuesta con gusto por el Mediterráneo y por los trazos internacionales.
Bol de açai con muesli, frutas de temporada, tortitas caseras con sirope de arce y mascarpone, huevos revueltos o pochados además de una extensa selección de cruasanes, tostas y zumos protagoniza la carta de desayunos de 'La Torre'. Quien no se decida siempre podrá optar por el desayuno continental y probarlo casi todo.
El restaurante está ubicado en una atalaya en forma de pasarela de madera y mesas que se asoman a la costa escarpada del Cap Negret. En frente no se ve construcción alguna, tan solo un camino pedregoso que se precipita hacia el acantilado. Al oeste divisamos el islote de Sa Conillera y al norte el perfil del cabo Nonó. Un grupo empieza el día con una sesión de yoga en medio de todo este entorno natural. Otra propuesta más que ofrece el hostal para mimetizarse con su naturaleza. ¿Para explorarla?
La ubicación del 'Hostal La Torre', en las inmediaciones de Sant Antoni de Portmany, permite hacer de ella una excelente base de operaciones para descubrir la cara oeste de la isla de Ibiza. Desde las calas de Conta y cala Bassa hasta los acantilados de Torres d' en Lluc se despliega un tablero dibujado por bahías recortadas y promontorios que esconden rincones solitarios ideales para desaparecer y otros animados ideales para ser visto.
Si no queremos alejarnos mucho de 'La Torre', caminaremos por la senda que bordea la costa rumbo sur hasta toparnos en 15 minutos con otros dos tesoros de Sant Antoni. Cala Gració y su hermana pequeña Cala Gracioneta aparecen como dos pequeños arenales que suelen estar muy concurridos en periodo estival. Este último cuenta con un chiringuito donde rinden homenaje al arroz, al pescado y a la carne a la brasa además de a la gente guapa que aquí se congrega. Desde este enclave playero, otra opción para explorar el litoral es alquilar un stand up paddle (SUP) o un kayak para remar desde Cap Blanc a Punta Galera.
La bici también gana puntos cuando lo que se quiere es captar el ritmo del paisaje. Desde 'La Torre' podemos pedalear hasta el siempre animado Sant Antoni al sur o al norte rumbo a cala Salada y Saladeta. Estas dos playas íntimas forman una bahía de aguas claras que hace del esnórquel otro plan seductor. Recorridos en quad, en Vespa, entrenador personal... el equipo del hotel, en comunicación con diferentes empresas de turismo activo, ayudará al huésped a elegir el mejor plan para exprimir al máximo el día. La tarde ya está reservada.
El sol empieza a precipitarse hacia el Mediterráneo y anuncia el momento de volver al hotel para no perderse este “espectáculo”, en palabras de Christian Anadón. Los devotos del crepúsculo acuden engalanados a 'La Torre'. Descienden por el camino que cruza el jardín y atraviesan la puerta como un túnel que muestra la inmensidad del Mediterráneo en un diálogo con la luz del sol que cambia a cada minuto. “Es un sitio que impacta”, comenta Anadón. ¿Cómo sobreponerse?
Moskow Mule Torre, Javier's Margarita o Balearic Spritz entre diez variedades de cócteles Premium. O clásicos como el mojito, la caipiriña o el long island también reclaman su espacio en la mesa como lo hacen los 16 tipos de gin tonic y las elaboraciones sin alcohol. Una extensa carta de vinos, de cavas y espumosos completan la propuesta para maridar los primeros compases de un ritual donde la música tiene un papel fundamental.
“Hemos seleccionado a disc jockeys que entienden la puesta de sol de diferentes maneras”. Así lo explica Christian Anadón, que junto a su hermano Alan forman la dupla de música electrónica Mambo Brothers. Pero ¿a qué suena un atardecer en 'La Torre'? Depende del día. “Desde el chill out más auténtico al new age, pasando por un sonido orgánico y todo el espectro creativo de la música más downtempo”, palabra de DJ. Y que caiga el sol, bañando el cielo de tonos cobre, rojo y fucsia, y de sensaciones este palco privilegiado sobre el mar y la silueta de Sa Conillera. Los espectadores aplauden, toman fotos y vídeos. Esto pasa en Ibiza.
Como clausura de un momento tan común como especial en esta parte de la isla, 'La Torre' vuelve a recurrir a su restaurante, ahora iluminado por la luz tenue de las velas y el cielo estrellado. Su propuesta para las cenas es ya un clásico en la isla y quien no reserve es difícil que encuentre hueco.
¿Cómo empezar? Con tapas inmortales como el jamón ibérico, el tartar de tomate o de salmón y unos calamares crujientes con mayonesa cítrica, además de una refrescante ensalada de burrata. Como plato principal, desde el mar llega la lubina a la plancha y la pata de pulpo al grill, y desde el campo el entrecot de ternera y su visión de la hamburguesa de res. Para un final goloso probaremos el volcán de dulce de leche, el coulant de chocolate o la tarta de queso con salsa de frutos rojos. Y así transcurre un día un cualquiera en el 'Hostal La Torre'.
'HOSTAL LA TORRE' - Carretera Cap Negret, 25. Sant Antoni de Portmany, Ibiza. Tel: 971 34 22 71.
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