Compartir

{{title}}
{{buttonText}}
1 /

Almoharín

Tierra de higos y de agradables sorpresas

Famosa por sus higos –el helado que se hace con ellos es un arma infalible contra el calor del verano, intenso en estas tierras hasta el punto de secar el Río Búrdalo, que es una de las lindes del término municipal–, en Almoharín es preciso detenerse para visitar la Iglesia Parroquial de El Salvador, declarada Bien de Interés Cultural y construida durante el siglo XVI. El templo tiene una torre de tres cuerpos y, en su interior, llama la atención el retablo mayor, de estilo barroco, y las columnas que sustentan las tres naves de la iglesia. El otro edificio religioso de interés en este municipio cacereño es la Ermita de Nuestra Señora de Sopetrán, del siglo XI, que tiene como curiosidad el haber sido mandada construir por el príncipe moro Ali Maymón al convertirse al cristianismo. Su retablo barroco es una sorpresa de lo más agradable, como lo es el puente romano que, en un estado aceptable, cruza el Búrdalo a las afueras del pueblo.

Información de contacto