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Valls

Valls, lugar medieval a ras del cielo

En Valls se elevan los castillos invisibles desafiando la naturaleza humana. Son símbolo de esta ciudad y su pasado, uno en el que la tierra estaba enclavada por castillos y fortalezas, y que le otorgaban a este lugar un carácter combativo y mágico. Los castillos invisibles son la tradición de la ciudad, los 'Castells' consisten en unas torres humanas que desafían el cielo y que ha convertido a Valls en la espectadora privilegiada de históricos castillos de piel en los que un grupo de personas o 'Castellers' se suben unos sobre otros en un monumento impresionante y efímero.

Navegar por las calles de Valls es imaginar a los coches de caballos rozando sus herraduras con el suelo de piedra a cada paso. Una ciudad con llanos y montañas a los lados y casco histórico medieval con iglesias de piedra como la de Sant Joan y torres altas como el Campanario que la alejan del mundo para convertirla en un enclave singular que desafia al cielo y a la Historia. La Plaza Castellera, el Ayuntamiento, la plaza de l´Oli, la Judería, la casa de Santes Creus, o  la casa Claravalls, dan muestra de todo ello y crean en la ciudad una especie de valle de edificaciones de marrones y grises y sabor medieval. Sabor a tiempos inmemoriales y a calçots, unas cebollas blancas tan típicas que le dan nombre a la gran cita de Valls, la Calçotada. Tierra catalana de sabores, alturas e Historia donde es posible remontarse incluso a tiempos del Cister con el monasterio de Sant Joan, tan inabarcable como la propia Valls.
 

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