Casa Consistorial

Betanzos, Coruña, A

Qué ver

Cada vez está más presente en las ferias y fiestas, no solo el edificio sino la plaza que lo acoge, la Constitución. El gran Ventura Rodríguez lo diseñó a finales del siglo XVIII, en lo alto del castro de Untia. Con los ojos bien abiertos, dos ventanales en la planta baja y una boca alzada en rectángulo por entrada, toda la sonrisa en la primera planta con los balcones verdes, todos comunicados con el hierro forjado que sostiene a quienes saludan a la plaza. La cantera y las piedras con su consistencia dan forma cuadrada a este singular edificio de dos plantas que muchas familias gallegas se construyeron en el periodo de esplendor en Betanzos, porque caballeros no eran escasos allá por el s. XV y XVI. Nuestro punto de partida, la Casa del Consello de Betanzos, la Casa consistorial, que entre iglesia de Santiago y eventos nos aproxima al puerto. Puerto de entradas y salidas, de resoluciones y bandos, allí siempre está el neoclásico en persona, con las armas reales de España, de Galicia y de la Villa. Con un detalle, aquí las armas son policromadas, como así también los capiteles de su segunda planta.

En la misma plaza de la Constitución aprovechamos para ver otros tantos edificios betanceiros, como el pazo de Bendaña, del s. XV, y la Casa Núñez, también ubicada en la plaza, pero en la calle do Castro y construida en 1923, modernista y pintoresca. En la casa Núñez, de estilo colonial, se encuentra el Centro de Interpretación de la Estampa Contemporánea. La plaza se puede abandonar sin perder los galones de nobleza por la calle Lanzós, donde está el pazo del mismo nombre, en el que vivió el conde de Maceda.