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Los secretos culinarios de las carreteras andaluzas
Restaurantes en la A-4 y A-49 con Solete: Dónde comer rico y barato

Son clave para disfrutar de los lugares del Cantábrico, pero conviene conocer su funcionamiento. Entre pleamar y bajamar hay seis horas de diferencia y cambia en una hora más cada día, lo cual significa que antes de lanzarse a la ruta de cada jornada es mejor informarse sobre las horas de la marea alta y de la baja.
Normalmente, posadas, hoteles, bares y restaurantes a pie de costa conocen la evolución de la marea cada día. Además, los móviles y los periódicos locales ofrecen la información, junto a la del tiempo.
En días de repunte turístico, como Semana Santa o agosto, el tránsito puede llegar a regularse por la carretera del interior de la caverna.