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“Vivo el barrio, leo sin rumbo” es la frase que mejor define a la nueva librería de Marqués de Vadillo, en el distrito de Carabanchel. Tanto que la han plasmado en una tote bag. ‘Derivas’ se llama en alusión a ese deambular sin un camino fijado, un poco lo que quieren ser ellos. También un espacio seguro e inclusivo, donde la escucha y el diálogo son la clave.
Este cóctel de valores ha cristalizado en una librería con vocación de punto de encuentro para el barrio, de espacio cultural multidisciplinar en torno a la literatura. Al frente de ‘Derivas’ se encuentran Paula Bordonada y Chus Navarro. Nunca habían sido libreros, pero siempre habían estado en contacto con el mundo de los libros. Ella, desde la investigación, la programación en cine y la gestión cultural que ha desempeñado durante años. Él, a través de la escritura y del máster de Narrativa de la Escuela de Escritores.
Ambos han construido una librería bonita. Muy bonita. Por fuera y, sobre todo, por dentro. Desde la calle Jacinto Verdaguer su enorme ventanal les sirve de escaparate para ir abriendo boca a lo que uno va a encontrar en su interior. A saber, un fondo generalista que llena las estanterías de ‘Derivas’ de los imprescindibles best sellers pero también de esos libros un poco más buscados, obra de editoriales más pequeñas. No faltan tampoco los títulos infantiles, que tienen su propia sala; los de cocina, ensayo, teatro, cine o música.
“Para nosotros era muy importante que fuera un espacio muy inclusivo con todo el mundo. Venimos también huyendo de la élite cultural concebida como una élite. De ahí, el equilibrio. La literatura que más nos interesa es más independiente y nos atraen editoriales más pequeñas, más desconocidas; pero sabemos que hay otros libros que también tienen que estar”, explica Paula.
Este fondo de libros, compuesto por unos 2.000 títulos, les ha quedado además bastante paritario. “No nos hemos propuesto que sea una librería activamente feminista; pero lo es porque lo somos. Además, últimamente lo que más nos interesa está escrito por mujeres”, cuenta Paula.
De hecho, donde sí que se han propuesto explícitamente dar más peso a las mujeres es en el Club de Lectura con el que estrenan el otoño. Porque esto iba de ser un espacio cultural. Por ello habrá también un taller de escritura creativa, tanto para niños como para adultos, que impartirá Chus; presentaciones y cuentacuentos. Eso, de momento; porque ya piensan en actividades de regulación y exploración emocional usando el arte y la literatura, en yoga para niños a través de los cuentos, en un taller de creación de monstruos…que irán anunciando en su cuenta de Instagram.
Propuestas, todas ellas, que adaptarán en función de lo que el barrio les vaya pidiendo. “Nosotros llevamos unos años viviendo aquí, aunque no somos de Carabanchel, y la idea es relacionarnos y saber qué interesa, qué apetece, e ir probando”, añade Paula.
De momento, ganas de espacio cultural, había. Eso es lo que han detectado desde que abrieron el pasado 4 de junio. Notan a la gente cariñosa, amable y entregada, “con ilusión por tener un espacio como este por aquí”, asegura Chus, quien ejerce de librero cuando le pedimos una recomendación. Verano, de Ali Smith, es su apuesta. “Me parece muy interesante de leer porque muestra mucho y muy bien los tiempos que vivimos, sin medias tintas, muy claro”.
“Por recoger ‘Derivas’ y nuestra particular obsesión con el urbanismo y la manera de vivir, me voy a ir por Barrios, bloques y basura, de Julia Wertz”, escoge Paula. “Es una reflexión muy interesante sobre la ciudad, una mirada crítica y poética, en este caso, sobre Nueva York; pero creo que es aplicable a cualquier ciudad”.
‘DERIVAS’ - Jacinto Verdaguer, 17 -Metro: Marqués de Vadillo (Línea 5)-. Horario: de martes a sábado, de 10:00 a 14:00 horas y de 17:00 a 20:30 horas. Tel. 91 113 56 16.
A la fachada del icónico cine Doré le ha salido un escaparate nuevo. Nuevo y apetecible, como lo suelen ser los de las librerías. El responsable de que luzca interesante, variado y atractivo es José Salazar, el librero de la reabierta ‘Tienda-librería del Doré’. Llevaba más de cinco años cerrada y, para su puesta a punto, se ha llevado a cabo un proceso de acondicionamiento y reforma que la ha dotado de un acceso directo desde el exterior.
“Es Filmoteca la que realiza esta renovación y la apertura al exterior, que antes no existía. La fachada está protegida, con lo cual cualquier intervención o tipo de reforma que hagas tiene que estar muy justificada. En este caso, pudo ser gracias a que, revisando fotos antiguas, encuentran un libro con una fotografía de los años 30 en la que se ve que aquí había un puesto de melones y que estaba abierto al exterior”, explica José.
Este acceso, recuperado desde la calle Santa Isabel y la independencia horaria que le proporciona respecto al cine, hizo que los responsables de la librería ‘El Buscón’, una sociedad cooperativa que lleva 45 años en el barrio de Prosperidad, decidieran presentarse al concurso para su explotación. Ahora tienen por delante una concesión de dos años ampliables hasta cinco.
Disponen únicamente de 20 metros cuadrados, pero han sabido darle un toque especial para que la ‘Librería del Doré’ tenga ese algo que la diferencie de las que se pueden encontrar por la zona de Antón Martín en la que se ubica. Así, al fondo de libros se les han unido ilustraciones, bolsas, tazas y ya piensan en cómo traer los carteles de cine que mucha gente les pide.
Es cierto que el grueso de su oferta lo componen libros relacionados con el mundo del séptimo arte (historia, ensayos, biografías, libros conmemorativos, tratados de estética, manuales, monográficos…), aunque su selección también incluye títulos que hayan servido de inspiración para películas, narrativa del siglo XX y contemporánea, clásicos, novela gráfica y literatura infantil.
José se está estrenando como librero, está satisfecho y decidido a corresponder a la acogida que han recibido. “En un sitio tan bonito tienes que intentar abrir una librería que responda a este espacio. Entiendo que lo estamos consiguiendo, poco a poco. Siempre hay cosas que mejorar, pero sí que estamos contentos con cómo ha quedado y la gente nos dice que la librería está muy bonita”, cuenta.
Si tuviera que recomendarnos uno solo de estos libros, José no lo duda: En el momento del parpadeo, de Walter Murch. “Es un clásico de los libros de cine. Habla de cine en general y es un libro interesante para cualquier cinéfilo, pero está especializado en montaje”. Y sí, nos confirma que ya trabajan en organizar presentaciones, coloquios y eventos. “La idea es darle una vida cultural al cine más allá de las proyecciones, claro”.
‘LIBRERÍA DEL DORÉ’ - Santa Isabel, 3 -Metro: Antón Martín (Línea 1)-. Horario: de martes a domingo, de 11:30 a 14:30 horas y de 17:00 a 21:00 horas. Tel. 663 22 95 09.
Una llamativa puerta amarilla emerge en el número 4 de la calle Medellín, en el distrito de Chamberí. Traspasarla supone entrar en ‘Paperground Bookshop’, la nueva librería madrileña que es toda una declaración de amor a las revistas internacionales y a los libros de editoriales independientes y autoeditados.
Será por el orden de sus estanterías, por la belleza y la calidad de los volúmenes que las habitan o por el buen gusto que lo domina todo, pero la realidad es que uno sabe cuándo entra en ‘Paperground’ pero no cuándo sale.
Los responsables de ese perder la noción del tiempo curioseando entre títulos llegados de cualquier parte del mundo son Margherita Visentini y Asier Rua. Ambos llevaban unos siete años trabajando en sus proyectos personales. Margherita, periodista, edita la revista Polpettas on Paper, centrada en artistas y sus historias; y Asier, fotógrafo, está al frente de la editorial Rua Ediciones, especializada en arquitectura.
“El año pasado vimos que había muchas pequeñas editoriales y proyectos que se parecían a los nuestros. Se nos ocurrió la idea de montar nuestra oficina aquí y aprovechar un espacio a pie de calle para traer proyectos similares a los nuestros porque nos parecía que no había un sitio físico permanente para este tipo de proyectos”, cuenta Asier sobre los orígenes de ‘Paperground’. Mundo rural, ecología y espiritualidad, plantas, psicología, cambio climático… Margherita y su ojo habituado a descubrir joyas en forma de revistas en The Magazine Club son los responsables del fondo de la librería.
“No sé si nos preocupa tanto que sean mainstream o no. Lo que nos preocupa un poco más es cómo se aborda a nivel periodístico y a nivel de proyecto editorial”, reflexiona Asier. “Todos los proyectos editoriales que tenemos son bastante pequeños comparados con otros. Entonces, son más independientes: casi no tienen o no tienen directamente publicidad, con lo cual el contenido no está financiado. Para nosotros eso tiene un valor periodístico que otras revistas no tienen”.
Hamman, procedente de Turquía y centrada en la cultura del baño, con fotografías para el recuerdo y una cuidadísima edición; o Bibliotech, una oda a los libros, una invitación a leer en papel, con calma e interiorizando, son dos buenos ejemplos de los resultados de esta labor de rastreo de revistas.
En lo que al fondo de libros se refiere, Asier ha sido el encargado de darle forma. Bien de fotolibro, de arte, de diseño y de urbanismo. También de sensibilidad: la de muchos de los volúmenes y la suya para escogerlos. No se explica de otra forma si no que, entre la oferta de ‘Paperground’, se encuentre un almendro en flor hecho libro, obra del italiano Luca Hugo Brucculeri; o Pausa (Chiquita Room), una obra de Mercè Soler que reproduce El amante, de Harold Pinter, a través de los silencios y los signos de puntuación.
“Conocemos directamente a los editores o a los autores de casi todo lo que tenemos y si no les conocemos, les hemos contactado y vienen aquí. Tenemos un contacto bastante personal con los proyectos y también les traemos porque nos gusta apoyar las iniciativas”, cuenta Asier.
Abrieron en mayo, siguiendo la estela de muchos de los comercios enfocados en el diseño que están surgiendo cerca de Olavide y, aunque al principio querían tomárselo con calma, “nos hemos ido liando y, como la ciudad nos ha recibido bien, hemos querido responder a eso”. Y es que seguimos leyendo en papel. Especialmente los más jóvenes que entran en ‘Paperground’ buscando revistas de cultura digital, fotografía y temas de diseño. “A mí me sorprendía porque yo pensaba que estaban súper digitalizados y que aquí iba a venir gente de en torno a los 30 y pico y cuarenta”, apunta.
Ya han hecho algún encuentro y lo que van a mantener de forma permanente son las exposiciones. A la entrada y visibles desde la calle. En un escaparate expositor en el que irán desplegando distintos formatos de muestra con el objetivo de dar a conocer a personas que están implicadas en el mundo del libro, pero desde distintos oficios. El primero fue el fotógrafo alicantino Ricardo Cases, al que le siguió la editorial Familia Editions, especializada en libros de artistas brasileños; ya saben que, a continuación, será el turno de la revista de arquitectura El Croquis y que a futuro habrá también una imprenta y un diseñador gráfico.
‘PAPERGROUND BOOKSHOP’ - Medellín, 4 -Metro: Iglesia (Línea 1)-. Horario: de martes a viernes, de 10:00 a 14:00 horas y de 17:00 a 20:00 horas. Sábados de 10:00 a 14:00 horas.
El esquinazo de las calles Olid y Palafox, en el corazón de Chamberí, se ha puesto coqueto. Una fachada granate abrió sus grandes ventanales el pasado 18 de junio, dejando ver en su interior el paraíso de estanterías repletas y mesitas listas para contener cafés que es ‘Olavide, Bar de Libros’.
“‘Olavide’ te invita a pasar y a quedarte. No es una librería que dé miedo y en sus anaqueles pueden convivir perfectamente la poesía de Anne Carson con una biografía de Maradona, libros de arte y las novelas negras de Domingo Villar”, nos cuentan Raquel Garzón y Daniel Ulanovsky Sack, la pareja al frente de este espacio en el que se estrenan como libreros. “Lo sentimos como un sueño realizado”.
Ambos nacieron en Argentina, llevan 21 años juntos y ya habían vivido en España antes de tener hijos. En agosto de 2020, en plena pandemia, decidieron regresar con su familia. Periodistas de profesión y vinculados al mundo de los libros desde siempre, Raquel y Daniel han abierto una librería con la intención de construir un espacio propio, de encuentro, de disfrute y de reflexión. “La combinación entre librería y café ayuda a crear una atmósfera distinta. Creemos que es una librería para un público curioso y formado, que puede ser disfrutada también por gente que no se definiría a sí misma como lectora”, cuentan.
Una librería para todos los públicos, algo de lo que su selección de libros es la prueba. En ella conviven las novedades con un fondo editorial amplio: ficción española, latinoamericana e internacional, ensayo de diversos temas, poesía, biografías, diarios y correspondencias; novela gráfica y títulos infantiles y juveniles. ¿Cuál se llevarían a casa? “Hay un libro precioso de fotos de Marilyn Monroe con texto de Norman Mailer que nos compraríamos sin dudarlo”.
Eso pensando en sus gustos porque, si se trata de recomendar, Raquel y Daniel citan a Borges y siguen su filosofía de la lectura por placer: “Si Shakespeare lo aburre, no es para usted”. Están en ello, en lo de aprender a aconsejar a los clientes. “Sin conocerle, tenés que proponerle algo que lo divierta, lo emocione, lo haga pensar o lo ayude a seguir en un momento de crisis. Porque, y en eso creemos mucho, la lectura tiene esa capacidad de acompañar, de deslumbrar, de enseñar, de amparar, pero hay libros que llegan de distinto modo a distintas personas”.
Raquel y Daniel están muy contentos con el recibimiento que les ha dado la gente del barrio. Por ello les gustaría devolverles el favor, convirtiéndose en punto de encuentro y contribuyendo “a desarrollar una comunidad reflexiva, de disfrute y de emoción, que crea en esa frase de Enrique Vila-Matas que elegimos para nuestros marcapáginas: No hay nada más subversivo que la literatura”.
Así, una de las opciones que ofrecen es un espacio tranquilo para trabajar en su planta baja, donde además suele haber exposiciones temporales de fotografía. Entre sus planes está también continuar desarrollando talleres de escritura que ya han probado este verano, y poner en marcha los clubes de lectura y las presentaciones de libros. Y, de esta forma, poco a poco, irse convirtiendo en ese “sitio cálido para elegir libros, tomar una copa o un café, donde puede encontrarse con amigos a charlar de literatura o de cualquier cosa, en un clima relajado”.
‘OLAVIDE, BAR DE LIBROS’ - Olid, 14 -Metro: Iglesia (Línea 1)-. Horario: de lunes a domingo, de 11:00 a 15:00 horas y de 16:00 a 22:00 horas. Tel. 914 45 34 81.
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