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Piscinas municipales o privadas, fuentes en las que está permitido el baño, centros deportivos de alto nivel… Madrid cuenta con una infraestructura piscinera en la que no faltan piletas de dimensiones olímpicas, fosos de gran profundidad, tonificantes chorros de agua o fuentes en las que sí está permitido salpicarse.
De fácil acceso (a muchas de ellas se llega en transporte público) y con una entrada más que razonable (desde gratis a 6 o 9 euros), los madrileños y foráneos pueden disfrutar del solaz de un día al aire libre escapando de las altas temperaturas del asfalto. Mientras que la temperatura es de 30 ºC en el exterior, la calzada puede llegar a alcanzar los 60 ºC, por lo que no está de más ponerse la ropa de baño, preparar la neverita portátil con refrescos, agua y sándwiches, pertrecharse de toalla y crema solar, y acudir a alguna de las piscinas urbanas más emblemáticas de la capital de las cuales aquí va una selección.
Cuando se inauguró, hace ya 65 años, esta piscina fue la más grande de Europa al aire libre. Hoy, este recinto es mucho más que un lugar de ocio para darse un chapuzón, es todo un parque deportivo –era conocido como el Parque Sindical– con un sinfín de actividades a las que apuntarse. Varias federaciones madrileñas (golf, pádel, piragüismo, rugby o tiro, por ejemplo) tienen aquí su sede. Pero lo que lo convierte en espacio esencial para soportar las altas temperaturas capitalinas es que ostenta el récord de mayor lámina de agua de las piscinas veraniegas en Madrid, con un total de 7.258 metros cuadrados, casi siete veces más grande que una piscina olímpica. Está dividida en tres piletas conectadas entre sí, la general, de 5.693 metros cuadrados; la olímpica, de 800 metros cuadrados; y la infantil, con 765 metros cuadrados. Cuenta con una zona de césped donde extender la toalla y relajarse a gusto, además de servicios como cafetería, vestuarios, duchas…
Este es uno de los centros deportivos centrados en el agua situado en pleno centro de la ciudad. Cuenta con dos piscinas, una grande de 25 metros y otra pequeña dirigida a niños en las que se realizan actividades para ellos. Aquí, en las Escuelas de San Antón, todos aquellos que quieran ponerse en forma mediante ejercicios acuáticos lo tienen muy fácil gracias a disciplinas como aquagym, aquapump, aquapilates, latino-agua o el original Water Army Camp, que se basa en un intenso entrenamiento militar dentro del agua. Cuenta con una zona de bienestar donde poder relajarse con sus baños de vapor, chorros de hidromasaje y sus saunas y, quien prefiera pasar una mañana en remojo, lo puede hacer, además, con unas increíbles vistas a la ciudad.
Este es otro de los complejos con más solera de Madrid, ya que lleva en funcionamiento desde 1930, cuando la Agrupación Deportiva Canal fundó sobre el depósito una piscina y un campo de fútbol. Hoy cuenta con salas para tenis, baloncesto, frontón o gimnasio. Aunque su principal atractivo en estos meses estivales es su piscina de verano, con 1.113 metros cuadrados de lámina de agua, que resulta un refugio para los vecinos del barrio de Chamberí. Cuenta también con piscina para los más pequeños de 25 metros cuadrados. Además, también se puede encontrar una zona de playa, solárium, cafetería y otras áreas de servicios básicos.
Este complejo de piscinas fue creado en 1986 para albergar los Mundiales de Natación (en 2004 también albergó el Campeonato de Europa de Natación) por lo que sus instalaciones son únicas para el desarrollo de disciplinas acuáticas, como el salto de trampolín, el waterpolo o la natación sincronizada. Cuenta con dos piscinas olímpicas (una cubierta y otra descubierta) de 50 metros cada una, un foso de saltos con cuatro plataformas de diferentes alturas (de 3 hasta 10 metros) y nueve trampolines (cinco de 1 metro y cuatro, de 3 metros de altura), además de otras dos piletas donde los bebés pueden aprender a nadar. Dispone de instalaciones anexas donde realizar fitness, pilates, musculación… Un centro de alto rendimiento para la natación perfecto no solo para darse unos chapuzones, sino también para aprender a saltar en trampolín (hay cursos), o practicar aquafitness.
Son múltiples las actividades que se pueden llevar a cabo en estas instalaciones: baloncesto, voleibol, frontenis, fútbol sala, atletismo, rocódromo… Pero cuando llega el verano, lo más apetecible son sus piscinas. Hay de chapoteo para los más pequeños, de varios metros para hacerse un largo en alguna de sus calles y, lo más apetecible, de olas artificiales, que además de ser la única de estas características en la Comunidad de Madrid, este año son mucho más potentes. Por supuesto, en esta playa urbana no faltan las tumbonas.
Este centro deportivo cuenta con instalaciones únicas para la práctica del hockey, el tenis, el patinaje, el bádminton o el balonmano, por ejemplo. Pero también tiene una infraestructura acuática perfecta para huir de las altas temperaturas estivales. Sus dos piscinas descubiertas de 50 metros cada una invitan al chapuzón incluso sin bañador porque, este año, cuenta con una zona nudista. Y, para evocar los deportes playeros ofrece un espacio para practicar voley-playa.
Es una de las piscinas más veteranas y queridas porque muchas generaciones de madrileños han ido a refrescar sus calores allí. La piscina del Lago, como popularmente se la conoce, se encuentra situada en la Casa de Campo, el pulmón verde madrileño, por lo que queda muy cerca del centro de la capital y se puede acceder a ella fácilmente en Metro. Cuenta con sala de musculación, piscina cubierta, cafetería… y por supuesto, sus piscinas de verano. Una de 33 metros (ahora en obras), la infantil y otra de 36 metros con zonas de césped alrededor donde extender la toalla. Está considerada una de las piscinas más gayfriendly de la capital y, además, se admite el topless.
No hace falta estar matriculado en una de las universidades más prestigiosas e históricas de Madrid. Es perfecta para los que gustan estar rodeados de verde (la sombra bajo sus árboles son las más codiciadas) ya que se encuentra en un entorno de aire limpio. Forma parte del Complejo Deportivo Zona Sur, con instalaciones para la práctica del fútbol, el rugby, la escalada, o el voley-playa. Cuenta con una piscina olímpica y otra con trampolines más profunda donde hacer inmersión. Su ambiente es mayoritariamente joven y también gayfriendly.
Además de contar con un ambiente tolerante (también ocupa los primeros puestos entre las favoritas de la comunidad gay madrileña) dispone de dos piscinas de verano (una de 20 y otra de 25 metros) perfectas para el remojón y el relax estival. No faltan las explanadas de hierba para extender la toalla y una terraza cerca del agua para tomar algo mientras contemplamos cómo se tiran los bañistas, además de merendero, para cuando queramos retomar fuerzas con el bocata casero. Por su ubicación, en el barrio de Arganzuela, suele estar llena de gente. Y, lo mejor, cuenta con un espacio adaptado (grúa y pileta) para facilitar el baño a personas con movilidad reducida.
En el popular barrio de Vallecas se encuentran estas instalaciones donde, además, de poder practicar aquagym o matronatación, por ejemplo, se puede disfrutar de una de las actividades más marchosas y refrescantes de los Veranos de la Villa. Se trata de Madrid Suena que, este año se celebrará el día 3 de agosto. Este día de piscina se convertirá en día de disco-piscina gracias a las sesiones de DJs que se sucederán a lo largo de la jornada. Artistas habituales en los mejores clubes de Madrid, Barcelona o Valencia (Nono, Jesús Gonsev, Paula Koski o Fran Campos, entre otros) se repartirán en dos zonas diferenciadas: una dedicada a la música disco, funk, soul, jazz y dub; y otra especial para los que busquen estar más relajados, con sonidos más ambientales y atmosféricos.
Cuando caminas por la ciudad achicharrándose a pleno sol estival, ¿nunca has tenido ganas de meterte en una fuente? Pues mientras que en la Cibeles, por poner un ejemplo, está totalmente prohibido, eso no ocurre en la Playa de Madrid Río que, aunque no tiene nada que ver con una playa, es la única fuente urbana donde está permitido el remojón. La instalación está formada por tres recintos acuáticos en los que se alternan diferentes efectos: lámina superficial, donde poder tumbarse y remojarse; chorros de agua de altura, capaces de producir diferentes efectos que van cambiando, y nubes de agua pulverizada. El vital elemento, además, está tratado y clorado para que no produzca ningún daño sobre la salud. Podemos plantar la toalla bajo la sombra de alguno de los árboles de las zonas de descanso y pasar una jornada de pícnic, relax y diversión.
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