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Varias cabras entre los acantilados de la ruta del Cares.

Guía completa de la Ruta del Cares (Asturias)

Explorando la ruta de rutas de Asturias

Actualizado: 16/09/2024

La senda del Cares nos presenta la “Garganta Divina”, uno de los cañones más espectaculares de nuestra geografía. Discurre por el corazón de los Picos de Europa para conectar las localidades de Poncebos en Asturias y Caín en León. Descubre la guía completa de la Ruta del Cares.

“Cumbres gigantescas se elevan agudas. Hondísimas y oscuras gargantas se encajan en la potente masa de calizas… En ningún macizo peninsular puede contemplarse un paisaje más atormentado. Los Picos de Europa pudieran ser considerados la máxima exaltación del paisaje calizo”. Son palabras del científico Francisco Hernández Pacheco en su libro Las rocas y el paisaje (1936). El parque nacional más antiguo de España (1918) se despliega para el visitante como un tablero de juegos salvaje y evocador e idílico e implacable a partes iguales que esconde tras cada ladera y cada valle un escenario con identidad propia. ¿Alpes? ¿Noruega? ¿Islandia? No hace falta comparar.

Las montañas de la ruta del Cares.
Los Picos de Europa son el parque nacional más antiguo de España. Foto: iStockphoto

El senderista descubre aquí incontables rutas para explorar la riqueza paisajística, histórica y cultural de este parque nacional de 646,6 km² comprendido entre Asturias, Cantabria y León. Pero hay una, que vertebra su corazón montañoso y que hay que tachar sí o sí de nuestra lista de planes de aventura. Hablamos de la ruta del Cares.

Ruta del Cares desde Poncebo: un “trekking divino”

“¿Dónde empezar?” Es esta una de las principales cuestiones que se plantea el senderista que se propone a recorrer este trekking lineal de 12 kilómetros que une las localidades de Poncebos (Asturias) y Caín (León). En total, son 24 kilómetros de caminata de ida y vuelta, de dificultad media y unas 6 horas y media de tiempo para terminarla. Se puede escoger cualquiera de estas dos localizaciones para empezar la ruta, aunque la más habitual suele ser Poncebos. Esta se sitúa en el concejo de Cabrales y desde ella parte también la senda y funicular que comunica con la famosa aldea de Bulnes. ¿Dónde aparcar? Un kilómetro antes de Poncebos encontraremos un amplio parking de 150 plazas para dejar nuestro vehículo.

El pueblo de Bulnes.
El pueblo de Bulnes. Foto: iStockphoto

Pero volvamos al Cares, el río de montaña que desemboca en el Deva y que esculpe este enorme cañón de caliza y de paredes verticales que alcanzan los 500 metros de altura. La senda se abrió entre 1945 y 1950 en la roca para el mantenimiento del canal de alimentación de la central hidroeléctrica de Camarmeña – Poncebos, que fue construido entre 1916 y 1921.

Paraíso vertical

Comenzamos el recorrido en subida constante durante dos kilómetros que nos van presentando este escenario vertiginoso y quebrado hasta llegar a la zona de Los Collados. Que no se preocupe el senderista, pues, a diferencia de otras rutas de Picos de Europa, la del Cares está perfectamente señalizada en toda su extensión por lo que no hay posibilidad de pérdida. Sin embargo, aunque la dificultad reside más en la longitud que en la técnica del recorrido, no es extraño que hayan accidentes por caída y exceso de confianza.

Recorriendo la ruta del Cares desde Poncebos.
El camino desde Poncebos ofrece un paisaje natural único. Foto: iStockphoto

A medida que ascendemos, vamos dejando en el fondo del cañón el trazado del río Cares y en lo alto las cumbres que superan los 2.000 metros de altitud. También en este punto vemos el dibujo de la senda horadada en los farallones rocosos de los picos además de curiosos monolitos para continuar el recorrido en llano para deleite del caminante. El cañón del Cares es conocido como la Garganta Divina y enseguida entendemos por qué.

Río Cares
El cañón del Cares es conocido como la Garganta Divina. Foto: iStockphoto

Encontraremos hitos como el impresionante ojo de buey, bautizado como El Joracao, además de diferentes canales que vierten sus aguas en el río Cares y estrían la ladera. Son todo un reclamo para los montañeros más expertos que descienden y ascienden por estos empinados caminos como lo hacen las cabras que vamos encontrando en nuestro itinerario. Una buena muestra es la canal de Trea, la del Saigu, por la que baja el riachuelo del Robro que atravesaremos por un puente de madera, y la canal de Sabugo, en el lado opuesto del río.

Cabra montesa en la ruta del Cares.
Las cabras montesas habitan entre los acantilados del Cares. Foto: iStockphoto

Un capricho calcáreo para (casi) todos los públicos

Seguiremos atravesando pequeños túneles excavados en la roca hasta llegar a la majada de Culiembro y cruzar la pasarela de Los Martínez. Esta lleva su nombre en honor a la saga familiar de ilustres montañeros, guías y guardas de Los Picos de Europa. La pasarela se construyó tras el desprendimiento de la gran mole de La Madama de La Huertona, que cortó por completo la senda que une Poncebos con Caín.

Mirador del Tombo en la ruta del Cares.
Mirador del Tombo. Foto: iStockphoto

Caminaremos ahora en llano para contemplar el enorme canal de La Raíz, para atravesar algunos túneles más y llegar al puente Bolín, erigido en cemento y metal al otro lado del Cares. Estamos en el kilómetro 9,6 y la senda pronto nos muestra otro puente, el de Los Rebecos, los animales más fáciles de encontrar en este parque nacional. Desde la margen izquierda del río, podremos ver la oquedad conocida como La Cuevona y enfocar el último tramo hasta llegar a Caín.

La presa de Caín, en plena ruta del Cares
La presa de Caín, en plena ruta del Cares. Foto: iStockphoto

La senda del Cares se estrecha ahora hasta casi tocar sus paredes verticales, entre las que caminamos por túneles y grutas de hasta cien metros de longitud para divisar la pequeña presa de Caín, de 12 metros de longitud y 8 de altura. Hace de antesala a su pueblo homónimo, donde el paisaje angosto se abre para presentarnos el final, o ecuador de la ruta del Cares. Pues son muchos los que optan por retomar al punto de partida en coche o autobús desde esta localidad, como son muchas las empresas locales que ofertan este servicio.

 Caín de Valdeón, ruta del Cares.
La iglesia de Caín de Valdeón. Foto: iStockphoto

En el pueblo de Caín de Valdeón, a orillas del río Cares, dispondremos de bares, restaurantes, y zonas perfectas para un picnic y un descanso merecido antes de retomar el camino de vuelta. Serán 12 kilómetros ya explorados que, sin embargo, nos muestran una perspectiva totalmente diferente de la ruta del Cares pero igual de espectacular.

Guía para el senderista

“Esta ruta comporta riesgos adicionales que no tienen que ver directamente con el desnivel o nivel de dificultad de la propia ruta”. Así lo expresan desde la oficina de Turismo de Asturias. “Caída de piedras, superficies pulidas que se vuelven peligrosas con la lluvia, precipicios y otros accidentes orográficos, escasa o nula cobertura de móvil…”, añaden. Destacan la importancia de ir bien equipado, con calzado adecuado, ropa de abrigo e impermeable (tanto en invierno como verano), teléfono móvil, protección solar, bebida y comida. ¿Con niños? “No está prohibido llevarlos, pero es recomendable que sean mayores de 12 años, o bien llevarlos siempre de la mano, con el niño por la parte interior del camino”, apuntan.

Senderista en la ruta del Cares, Asturias
La ruta son 24 kilómetros de caminata de ida y vuelta. Foto: iStockphoto

¿Y las mascotas? Siempre con correa, y no extensible. “Está terminantemente prohibido llevar perros sueltos por la Ruta del Cares”, informan desde Turismo de Asturias. En resumen, “para realizar la Ruta del Cares lo más importante es ser precavido y previsor”.

Dónde dormir en la Ruta del Cares

En Poncebos, justo antes de empezar la ruta, disponemos de varios alojamientos en mitad de este paisaje abrupto a orillas del río como el 'Hotel Garganta del Cares' y el 'Orcea Hotel Mirador de Cabrales'. Ambas son propuestas de alojamiento rústico y sencillo que rondan los 50 euros el precio de la noche. Otra opción es 'Casa Maru', un coqueto hotel de montaña de 3 estrellas en Camarmeña. En Caín podremos alojarnos en el 'Hostal La Ruta' (70 euros la noche), 'La Casona de Palmira' (120 euros) o los clásicos' Casa Tino' (80 euros) y 'Casa Cuevas' (50 euros) que completan esta oferta de hoteles perdidos en la naturaleza del cañón del Cares.

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