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Es la primera playa de Barcelona si se realiza el recorrido de sur a norte. Está entre las más conocidas, aunque no por su nombre, si no porque en ella está ubicado uno de los hoteles más lujosos de la capital catalana: el ‘W Barcelona’. Forma parte del barrio pescador de la Barceloneta y se llega a ella a través del paseo que lleva el mismo nombre.
Además de tomar el sol y bañarse, allí hay una zona para hacer deporte y, justo debajo del hotel, se puede disfrutar de varios restaurantes. Entre ellos destaca el ‘Pez Vela’ (Passeig del Mare Nostrum, 19-21), en el que puedes degustar una buena paella y pescado de calidad. Otra de sus características más destacadas es que en algunos tramos se puede hacer nudismo.
Junto a la playa de Sant Sebastià, es una de las más antiguas de la ciudad. Esta playa de Barcelona, a pesar de ser pequeña, es una de las más concurridas y con más animación, ya que es de fácil acceso y dispone de aparcamientos cercanos. Su nombre se debe a la iglesia de Sant Miquel del Port, situada a seis minutos andando.
Como en la mayoría de las playas del barrio de la Barceloneta, no se puede fumar en temporada alta. Allí se pueden alquilar hamacas, hay quioscos para bebidas y wifi. Entre esta playa y la de Sant Sebastià se encuentra el Teleférico del Puerto, que une la Barceloneta con Montjuïc. Es una de las playas que cuenta con servicio de apoyo al baño, para ayudar a las personas con movilidad reducida a acceder al agua.
También de fácil acceso y con transporte público, la playa de la Barceloneta es la preferida por los jóvenes de la ciudad. Tiene equipamientos deportivos, como pistas de vóley, zona de gimnasia, mesa de ping-pong y hasta áreas pensadas para hacer actividades con los más pequeños. Otra de las ofertas de ocio de esta mítica playa es el servicio de biblioplaya, el alquiler de libros, periódicos y cuentos para fomentar la lectura. Esta zona está llena de bares y restaurantes en los que disfrutar de un after beach con amigos. Recibe el nombre del barrio de la Barceloneta, antiguamente el de los pescadores y ahora reconvertido en turístico.
Pasada la Barceloneta, en dirección norte, se encuentra la playa de Somorrostro, que acaba en la Torre Mapfre y otro de los hoteles más lujosos y con mejores vistas de la localidad, el ‘Hotel Arts Barcelona’. Justo delante de estas dos edificaciones está David y Goliat, la obra del famoso escultor Antoni Llena. En este tramo de playa se ubica una de las zonas más importantes de ocio nocturno de la capital catalana con locales como ‘Pachá’, ‘Opium’ o ‘Shoko’; y también conocidos restaurantes como ‘Ca la Nuri’ (Passeig Marítim de la Barceloneta, 55), expertos en arroces, pescados y mariscos, y ‘Bestial Barcelona’ (Ramon Trias Fargas, 2-4), igualmente de cocina mediterránea, con productos de calidad, y con una bonita terraza en la que disfrutar de una buena comida o cena amenizada con música.
Por su proximidad al puerto olímpico, la playa de Somorrostro cuenta con escuelas de vela y otras actividades navales. Y, justo delante del Hospital del Mar, se encuentra El Centro de la Playa, abierto de marzo a septiembre, una propuesta educativa dirigida al fomento del litoral de Barcelona que ofrece actividades variadas para todas las edades: talleres, cuentos, rutas, espectáculos, visitas, tertulias y juegos.
Más allá del puerto está Nova Icària, que se caracteriza, entre otras cosas, por el popular pez metálico diseñado por el arquitecto Frank Gehry. Esta zona del litoral es de creación posterior a la playas antes citadas, puesto que se diseñó al mismo tiempo que la urbanización de la Vila Olímpica, a finales de los años 80.
Llegar hasta ella es sencillo porque cuenta con toda la facilidad en accesos y transporte. Los niños tienen su zona de juegos y los más deportistas pueden ponerse a punto y, a continuación, pegarse un buen baño. Es una playa con ambiente juvenil, con chiringuitos en los que, además de comer o tomar algo, se puede disfrutar de la música. Las personas con movilidad reducida cuentan en esta playa con el servicio de apoyo al baño.
En esta playa está uno de los restaurantes más conocidos del litoral de Barcelona, el ‘Xiringuito Escribà’ (Avinguda del Litoral, 62). Unas tapas para empezar y un buen arroz para seguir son la especialidad de la casa, todo con productos de gran calidad. Abrió sus puertas cuando se celebraron las Olimpiadas y pronto se convirtió en un referente. Lo mismo sucedió con la playa de Bogatell, ahora mismo, una de las preferidas por los barceloneses. Actualmente la media de edad de los visitantes está en los 35 años y dispone de todo tipo de servicios, como el resto de playas de la ciudad. Está a pocos minutos de la Rambla del Poblenou, una de las calles más destacadas de Barcelona.
Si por algo destaca este paraje es porque se puede hacer nudismo. No es una playa completamente nudista, pero cada uno puede elegir su vestimenta. Tiene también equipamientos deportivos y una base náutica en la que se llevan a cabo actividades acuáticas. Justo al lado de la playa Mar Bella hay un skate park y, en verano, está disponible el servicio de biblioplaya. También queda cerca del barrio del Poblenou, una de las zonas de moda de Barcelona.
El público joven es el que más visita esta playa, situada en el distrito de San Martí, y la mayoría de los usuarios que acuden son vecinos del barrio, por lo que es considerada una de las más tranquilas de la ciudad. También influye en ello el hecho de que queda un poco alejada del centro. Aún así, dispone de la mayoría de servicios que también tiene el resto de playas e incluso cuenta con una pista de vóley playa.
Es la única playa petfriendly de Barcelona, además, es la más pequeña del litoral de la capital catalana. Dispone de un espacio separado destinado a los perros, que incluso pueden bañarse en la zona habilitada a tal efecto. La playa de Llevant es la más alejada del centro, por lo que hay menos aglomeraciones y más tranquilidad. Está totalmente equipada, como el resto de playas.
Aquellos que se quieran alejar un poco de la ciudad, en el área metropolitana de Barcelona pueden encontrar igualmente una oferta playera interesante. En la zona sur destacan:
También conocida como playa de Murtra, es una de las cuatro playas que hay en el término municipal de Viladecans. La definen como un paraje ideal para ir en familia, con niños, ya que es muy ancha, tiene un parque infantil en la arena y el agua suele estar muy limpia. Otro de sus atractivos es que está cerca del aeropuerto del Prat, por lo que los más pequeños se lo pasarán pipa mirando cómo despegan y aterrizan los aviones. En esta playa existe la posibilidad de alquilar material para tener clases de windsurf, paddle surf, piraguas… Es la elección ideal para un día de playa en familia. Para llegar desde Barcelona tienes un autobús que te deja al lado y, si vas en coche, hay un aparcamiento público que cuesta unos 5 euros al día.
El municipio de Gavà tiene dos playas: la de Gavà y la de l’Estany. Ambas están unidas por el paseo marítimo de Gavà Mar, reconocido con el prestigioso premio de arquitectura FAD en 1995 y que cuenta con una escultura de Antoni Roselló. Es este un espacio en el que hay zonas de ocio, pero al mismo tiempo se trata de un lugar con un gran valor paisajístico.
De las dos playas, la más animada y visitada es la de Gavà. Tiene 3.530 metros y uno de sus principales atractivos son sus dunas. A través de ellas se pueden dar largos paseos disfrutando de la naturaleza y el medioambiente. También hay zonas de juegos y actividades para niños, y hasta se pueden hacer visitas y actividades guiadas. Y, si se busca una propuesta gastronómica de nivel, a pocos metros de la arena está el chiringuito ‘Kauai Gavà’ (Calafell, 25-27; Solete Guía Repsol)
Si eres futbolero y aficionado del FC Barcelona, en esta playa está el restaurante playero al que siempre iban Leo Messi y Luis Suárez -y el que visitan cuando vuelven a Barcelona-: el chiringuito ‘Chalito’ (Pie de playa, Carrer 15), especializado en comida argentina, entre otros platos como pizzas, ensaladas, wraps… La playa de la Pineda está situada al norte del municipio y tiene dunas, en las que se ha creado un itinerario para aquellos que quieran pasear entre la flora y la fauna de la zona. Para los deportistas, este paraje de 2.090 metros es el primero en el que se ha habilitado una zona de kitesurf regulada del área metropolitana de Barcelona.
Con 375 metros de longitud, es la playa más nueva de Barcelona, aunque no tiene arena. Es más bien como una gran piscina de agua salada, que está casi cerrada y muy controlada y delimitada, lo que la convierte en un lugar muy seguro para los niños y la gente mayor si se siguen en todo momento las indicaciones de los carteles y la megafonía. Para facilitarles el baño hay unas escaleras que bajan al mar. También está el servicio de apoyo al baño, destinado a personas con movilidad reducida.
Los amantes de los fondos marinos deben saber que aquí está ubicada la Escuela de Buceo Profesional Océanos y se recomienda usar un calzado adecuado para el baño para evitar posibles pinchazos de la colonia de erizos que habita en el lugar. Es un espacio muy tranquilo y sin aglomeraciones, porque está lejos del transporte público y tiene horario: de junio a septiembre, de 11:00 a 14:00 horas.
El litoral de Badalona tiene cinco kilómetros, de los que casi cuatro son de playas. Entre las más destacadas está la playa de la Estación, la más céntrica y concurrida de la localidad. De hecho, incluso puedes llegar en tren, puesto que, como su nombre indica, está cerca de la estación.
Allí hay pistas deportivas, servicios de ducha, socorrismo… y está rodeada de restaurantes y bares. Le sigue la playa de los Pescadores, también céntrica y rodeada de establecimientos en los que comer, cenar o tomar algo. En este paraje también hay pistas deportivas, como un campo de vóley playa y una portería de fútbol playa. Si se sigue la costa hacia el norte, hay más playas, eso sí, más alejadas del centro de Badalona y, por lo tanto, menos concurridas.
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