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Playas de ensueño para toda la familia
Cambrils es un pueblo de pescadores, hijo de un matrimonio bien avenido entre su puerto y el casco antiguo. Todo parece cuidado aquí, en la Costa Dorada, con fraternal protección. Como la que ofrece la torre medieval de vigilancia a la delicada iglesia barroca de Santa María. Al llegar a Cambrils, el Portal de la calle Mayor, uno de los pocos restos que se conservan de la muralla, nos dará la bienvenida al casco antiguo, escenario de mil historias que aquí acontecieron. Historias de romanos, por ejemplo, que eligieron este municipio para establecerse, tal y como nos muestra el yacimiento de la Villa Romana de Llosa o el Museo Molino de las Tres Eres. También en Cambrils resuenan los ecos de la unión de sus vecinos, que plantaron cara a las tropas de Felipe VI en la batalla de Cambrils. Una escultura con una hoz de hierro y madera que emerge del suelo los recuerda en la Plaça de Setge. Y soplan además aires con el talento de Gaudí, claramente perceptibles en la gran cascada del Parque Sama, que proyectó el arquitecto de Reus junto a uno de sus maestros.
El puerto es territorio de pescadores y de un frenético ritmo de trabajo para que Cambrils sea también uno de los mejores lugares para degustar pescado y marisco recién llegado del mar. Aquí las playas se corresponden exactamente con lo que la imaginación espera de ellas. Largas costas que parecen pulverizadas con oro en polvo y olas en calma, que llegan a la orilla con el único propósito de acariciar los pies que las recorren. Transitarlas de norte a sur, de Cap Sant Pere a Playa de la Ardiaca, garantiza veranos inolvidables para nuestra memoria. Estos matices adquieren magia en la noche de San Juan, cuando las hogueras se enseñorean del paisaje. Guardias y custodios de estos parajes costeros son un pino centenario y dos faros de colores antagónicos, rojo y verde, que hunden los pies en el mar. Parecen conversar tranquilos, sabiendo que tienen las espaldas cubiertas por las torres defensivas que salieron victoriosas del acecho de los piratas más temibles del mar Mediterráneo.