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Igualeja

El origen del Valle del Genal

El río que da vida al Valle del Genal nace en este pueblo. Un manantial que surge entre las rocas y se convierte pronto en cauce para conformar un bonito espacio declarado Monumento Natural. Desde ahí, el río Genal surte de agua a una quincena de municipios, con un primer tramo que discurre bajo esta pequeña localidad serrana. Su rumor se escucha bajo la llamada Plaza Embovedada, pero también desde prácticamente cualquier rincón de la localidad en época de lluvias.

El barrio alto de Igualeja se denomina Albaicín, con muros de roca, calles empedradas y tradicionales casas blancas donde los gatos bostezan al sol. En la parte baja se encuentra la Plaza de Andalucía, en cuyo alrededor se extiende una pequeña red de callejuelas con aroma a cocina tradicional. El edificio principal de Igualeja, la Iglesia de Santa Rosa de Lima, fue construido a comienzos del siglo XVI. En el siglo XX se reformó de manera íntegra, aunque se mantuvo la torre original, de estilo mudéjar y que inicialmente perteneció a una mezquita. También destaca la Ermita del Divino Pastor (siglo XVIII) y el Nicho del Señor de la Misericordia.

Rutas de senderismo, vías ferratas y otras muchas opciones ayudan a descubrir la exuberante naturaleza del Valle del Genal y los parajes que rodean a este coqueto municipio. Un entorno que se vuelve especialmente atractivo en otoño con los colores cobrizos de los castaños, época en la que también se recoge su fruto, de gran importancia económica y cultural para sus habitantes. 

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