Cargadero de Mollarri

Zarautz, Gipuzkoa/Guipúzcoa

Qué ver

Sin duda, el cargadero de Mollarri es una de las imágenes que quedaran grabadas con más fuerza en el viajero en su visita a Zarautz, tanto por su belleza natural como por la carga de historia que arrastra.

Antes de que los surfistas llenasen la playa de Zarautz, fueron otros hombres y otras actividades los encargados de animar esta costa. Hace cien años, la villa representaba un importante centro industrial, y este Cargadero de Mollarri que contemplamos era el lugar desde donde se embarcaba al mar el hierro extraído en las minas de Asteasu. Un tendido de cables a lo largo de 11 kilómetros y con 112 postes se encargaba de transportar el mineral desde el yacimiento hasta la costa, por medio de una red de vagonetas colgantes. No nos cuesta imaginar el espectáculo de ese teleférico minero yendo y viniendo sobre los acantilados, entre las dunas anaranjadas del hoy biotopo de Iñurritz, el verde monte de Talaimendi y el azul del embravecido mar Cantábrico como remate de este contraste de colores y paisajes. Zarautz ha querido recuperar parte de esta memoria, rehabilitando y abriendo a las visitas las instalaciones. Solo como mirador al mar abierto ya serían una visita obligada, pero el centro de interpretación habilitado se encarga también de que nadie se vaya del Cargadero de Mollari sin conocer completa su historia.