Iglesia de San Miguel Arcángel

Estella-Lizarra, Navarra

Qué ver

En el margen izquierdo del río Ega se dibuja la silueta de la iglesia, románica en sus inicios, de San Miguel Arcángel, cuyas torres, la de ladrillo, del siglo XVIII, y la pétrea medieval, se imponen, rotundas, sobre el resto de la austera edificación. Tiene dos puertas de acceso, pero una de ellas, la norte, eclipsa por completo la fachada del templo. Si la observamos detenidamente nos llevará a pensar que estamos contemplando la biblia escrita en piedra. Cinco columnas a cada lado sostienen capiteles bellamente decorados, en los que se pueden ver distintas escenas de la infancia de Jesucristo o escenas de caza. Sobre los capiteles se apoya una cornisa decorada con arcos concéntricos. En los salientes se puede distinguir a un león comiéndose a una persona, ángeles, ancianos músicos que anuncian el apocalipsis, profetas, martirio de santos, la lucha de San Miguel contra el dragón o las tres Marías frente al sepulcro vacío de Cristo. En el centro se encuentra un Cristo en actitud de bendecir, rodeado por los cuatro evangelistas, la Virgen y San Juan. Esta imagen la rodea una enrevesada inscripción en latín: "Nec deus est nec homo presens quam cernis imago – sed deus est et homo quem sacra figura imago (Esta imagen que contemplas no es Dios ni hombre; pero es Dios y hombre aquél a quien representa esta sagrada imagen).

En el interior, el templo está compuesto por tres naves; las laterales, con bóveda de crucería; y la central, con bóveda estrellada. Destaca el retablo Mayor barroco, con una imagen gótica de San Miguel, y el retablo gótico de Santa Elena.