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Viviendo en la ciudad, difícilmente los niños podrán experimentar sensaciones tan increíbles como las que les ofrece esta casa rural. Aunque está situada a escasos 5km del casco histórico de Donostia, está rodeada de un entorno natural único. La casa cuenta con una pequeña granja en la que los niños pueden sentirse pastores por un día, ayudando a pastorear e incluso esquilar a las ovejas, dando paseos a caballo o en poni y viendo de cerca vacas, cabras y hasta emús.
Dormir en el interior de una cueva y rodeados por un paisaje lunar. Es la experiencia que podemos ofrecerle a nuestros hijos si elegimos las Casas-Cueva Bardeneras, situadas a la entrada del Parque Natural de Bardenas Reales. Al margen de la singularidad del lugar, muy cerca tenemos varias atracciones ideales para niños como el propio entorno natural, el parque de atracciones de naturaleza Sensa Viva (a 3km) o el Palacio Real de Olite, que parece salido de un cuento de hadas.
No puede haber un ranking de alojamientos ideales para niños en el que no salga este resort. Además de un entorno natural espectacular, hay salas de juegos y actividades para todas las edades: ludoteca (2-12 años); babyclub (0-24 meses) y un club junior para jóvenes con actividades deportivas, ping-pong, billar… Todos ellos, además, pueden participar en excursiones a una granja cercana. El restaurante está totalmente equipado para niños, ¡incluso hacen papillas!.
Un auténtico paraíso en el que incluso nosotros nos sentiremos como niños. Cualquiera de los hoteles de Port Aventura Resort hacen las delicias de los más pequeños pero especialmente éste, ambientado como una gran mansión del siglo XIX. La decoración y los servicios de un cinco estrellas no son nada comparado con la felicidad que sienten los niños al saber que están a solo unos minutos del parque de atracciones Port Aventura, tomado estas semanas por el espíritu de Halloween que todavía colea.
Hace años que la cadena Invisa Hoteles apuesta por establecimientos kids friendly y eso se nota en hoteles como el Cala Verde, donde tanto sus instalaciones como su oferta de actividades está pensada para los más pequeños. En verano la estrella son las piscinas tematizas pero ahora que el tiempo no acompaña, lo pasan en grande con la zona de aventuras con puentes y circuitos de obstáculos, así como con las actividades didácticas y guiadas por monitores. Además, el hotel dispone de menús especiales, servicio de guardería y hasta alquiler de carros de bebé para que puedas viajar ligero de equipaje.
A 45 kilómetros de Salamanca, rodeada de montañas, encontramos esta casa ruralideal para familias y amigos, porque tiene hasta 12 plazas. Cuenta con una sala de entretenimiento completamente equipada: juegos de mesa, televisión y hasta videoconsola. Bajo petición, tenemos disponible todo tipo de menaje como trona, parque, cuna o calientabiberones. En su entorno, muchos planes para niños, desde rutas de senderismo hasta el castillo de Montemayor del Río.
Hay que tener muy presente la diversión infantil cuando se mete en una piscina un dragón y una nave espacial, es lo que ha hecho este resort donde las propuestas acuáticas son solo el principio de la diversión. Aunque en Canarias el buen tiempo nos permite darnos un baño hasta en invierno, si el termómetro baja, los niños pueden disfrutar con el programa RiuLand de actividades dirigidas para niños hasta 12 años o jóvenes de 13 a 17. El complejo, además, es un ‘todo incluido’ por lo que pensar en qué comer cada día es una preocupación menos.
Naturaleza, animales de granja e instalaciones para una estancia de lujo. Es lo que nos ofrece esta casa rural a una hora de Madrid. Aquí los niños lo pasan en grande con la variada fauna de la casa: desde perros y gatos hasta gallinas, gansos, ocas, pavos reales, peces multicolores, un burro e incluso una cerdita vietnamita. Su jardín, su pequeño estanque y la piscina con vistas increíbles a la sierra de Madrid hacen redonda la estancia para grandes y pequeños.
La de Sol Meliá es posiblemente una de las apuestas más divertidas para niños hecha por una cadena hotelera en España. Algunos de sus hoteles, como el Príncipe, cuentan con espacios tematizados dedicados a los Picapiedra, donde los más pequeños pueden jugar con el troncomóvil o pasear de la mano con Dino. La puesta en escena se completa con un completo programa de actividades, desde talleres de manualidades a cursos de cocina, tirolinas o rocódromo.
Es lo que podríamos llamar un regalo boomerang, es decir, que además de tener felices a los niños, consigues una estancia de lujo para ti. Se trata de uno de los balnearios más antiguos de España pero ha sabido reinventarse como pocos. Su hotel cuenta con una sala de juegos específica para niños (de 120m2), actividades dirigidas, talleres, actividades al aire libre, piscinas… y todo ello mientras tú disfrutas de los programas termales o el circuito spa.
Al pasar por la puerta de este hotel en la isla balear, de inmediato nos damos cuenta de que aquí, las familias con niños, entrarán en un auténtico paraíso del juego y la diversión. Apartamentoscompletamente equipados, restaurantes con todo lo necesario para atender a los más pequeños y Kikoland, un club donde los niños compartirán actividades con otros huéspedes de sus mismas edades, porque lo que diferencia a este hotel es que el club infantil está segmentado por edades.
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