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Extremeña de nacimiento, es una de las mejores embajadoras de su tierra (tiene la medalla de la Junta) y de ella presume allí donde va, a pesar de que lleva más de diez años viviendo en la localidad madrileña de Alcalá de Henares. En Valencia de Alcántara (Cáceres) tiene a su familia y sus raíces. Allí viaja cuando saca tiempo entre sus compromisos musicales, teatrales y televisivos.
Amante de los viajes, por trabajo y ocio, a Soraya Arnelas esta afición le viene desde su época de azafata de vuelo. Pasa mucho tiempo fuera de casa, pero cuando logra quedarse disfruta de los pequeños placeres como dormir, cocinar postres con recetas familiares, o pasar tiempo con su familia, sobre todo desde que nació su hija Manuela.
La artista vive en una permanente ruta, por ello valora sobremanera su tiempo de ocio y así nos lo cuenta, muy simpática y relajada, durante el trayecto en AVE a Zaragoza para participar en Anochece que no es poco, el nuevo formato de entretenimiento de Luis Larrodera en la Televisión de Aragón.
Una parada indispensable en Valencia de Alcántara es el bar 'Artesanos', donde, de pequeña, me encantaba ir a ver jugar a mi padre al ajedrez y donde todas las tardes se celebra un bingo y se sirve café de puchero. Para una celebración familiar, solemos ir a comer a San Pedro de Alcántara, en dirección a Portugal, al restaurante 'El Convento de San Pedro de Alcántara'. Fue un antiguo convento, que también es hospedería y cuenta con una chimenea central que le da un toque precioso. Me encanta comer allí embutidos de la zona como la patatera, cominera y fariñera. Probar un buen vino extremeño, como el Habla, junto con un plato típico que se llama frite, mi plato favorito de la cocina de mi tierra. Todo eso rodeada de la familia y de una buena noticia, hace que ese momento sea inolvidable.
Haciendo gira he conocido sitios que merecen la pena para comer. Hay un restaurante que recomiendo porque me sorprendió mucho, el 'Ancla'. Está en Combarro (Pontevedra) y es muy pequeñito, pero tiene el pescado más fresco, más rico y más barato que he probado en mi vida. Cuando vamos de gira por esa zona, hacemos parada obligatoria para comer allí.
Otro restaurante espectacular es 'Cueva Miñambres', en Valdevimbre, cerca de León, que también conocimos en ruta. Es espectacular dentro de una cueva, donde se rodó una película. Los alrededores parecen un pequeño poblado de hobbits de El Señor de los Anillos, así que impresiona pasear por allí. Se comen carnes riquísimas, paletillas de cordero, chuletones, cecinas de la zona... para chuparse los dedos.
Ahí me das en mi punto débil porque te recomendaría cualquier lugar de Extremadura. En la provincia de Cáceres me quedo con tres sitios. Uno de ellos es en la zona de Valencia de Alcántara, donde nací, en un pequeño pueblo que se llama Aceña de la Borrega. Es un restaurante familiar que se llama 'En cá Milio', donde se pueden degustar productos típicos extremeños de la mejor calidad. Es un pequeño bar-restaurante cerca de la frontera con Portugal, donde muchísimos famosos políticos, artistas, jugadores de fútbol o entrenadores, se escapan para poder acercarse a Extremadura a probar nuestros manjares.
'El 13 de San Antón' es otro de los restaurantes que hay que visitar si se va a Cáceres. Cuenta con una amplia carta de cocina de autor, de uno de los chefs más conocidos de Extremadura, Juanma Zamorano. Tiene tapas excelentes, quesos, ibéricos y los arroces merecen mucho la pena. Pero si se puede, hay que visitar 'Atrio' (3 Soles Repsol), que es el restaurante extremeño más soleado y estrellado. Además, para el amante del vino, tiene la mejor bodega de Europa y la carta parece una enciclopedia. Recibimos siempre un trato fantástico por parte de su chef, Toño Pérez, que es encantador. Posee una carta exquisita para los paladares más exigentes.
En la zona de Badajoz se encuentra el 'Lugaris', un restaurante muy acogedor, de cocina de autor que mezcla lo tradicional con las nuevas tendencias, y que lleva Javier García, uno de los cocineros extremeños más populares y queridos. Nosotros vamos en momentos especiales y celebraciones familiares. Le tengo mucho cariño porque me han dedicado un postre, sensaciones Soraya Arnelas, de leche merengada. Y si se busca en Badajoz algo más informal, pero con mucha calidad en la comida, con un entorno más campestre, caballos, terraza y fantástica parrilla de carnes y pescados, 'Puerta Vaguadas' es la mejor opción. Hacen la mejor pluma ibérica y el mejor bacalao a la brasa.
Justo en la frontera entre España y Portugal, en la zona de Puerto Roque, hay unas casas rurales espectaculares, con unos jardines increíbles y una piscina preciosa que recomiendo siempre a mis invitados. Se llama 'Casa Rural Puerto Roque' y cuenta con pequeños apartamentos, como casitas adosadas, con decoración rústica y muy confortables. Dan mucha paz y te hacen desconectar de todo. Además, esa cercanía entre dos países da la opción de poder probar diferentes gastronomías, con una gran diversidad para actividades de ocio. Hay ríos para bañarse, organizan paseos a caballo, visitas a castillos medievales, mercadillos, ver dólmenes prehistóricos, pinturas rupestres.
Conocemos muchos sitios con encanto, pero nos quedamos muchas veces en pequeñas casas rurales, donde el trato es muy familiar. Así hemos conocido gente maravillosa y los desayunos son hechos con mucho mimo por los señores de la casa. Me quedo con el recuerdo de la 'Posada Los Lienzos', en Vargas, a poca distancia de Santander. Es una casa de película y el trato es fantástico, sobre todo el de los dueños, Verónica y Lorenzo. Es tranquila, hogareña, tiene un enorme jardín y la comida es estupenda.
Mis últimas vacaciones especiales han sido en la provincia de Cádiz, en Conil de la Frontera. Con mis padres, mi chico y mi hija Manuela. Han sido unos días muy bonitos y relajados. Cádiz es bien conocida por su gastronomía, por sus largas playas y su buen tiempo además del buen humor de los andaluces, y hemos disfrutado de todo eso.
Conil de la Frontera tiene playas infinitas para dar paseos al atardecer y probablemente las mejores puestas de sol. Nos quedamos en la casa de un amigo, pero en esa zona hay hoteles muy cucos. Para probar unas tapas bien hechas y sorprendentes decoraciones, recomiendo el bar 'Los hermanos', un negocio familiar, al estilo tasca andaluza, muy céntrico. Y si lo que le apetece a uno es comer en la playa, el restaurante 'La Ola' es la mejor opción. Es un precioso restaurante a pie de mar con un amplio menú de pescados y productos andaluces, con unas vistas mágicas.
Mi restaurante favorito es el 'Pozo De Los Sabores'. Es otro de esos sitios en los que aprovecho cada vez que vienen mis familiares o amigos a visitarme. El propietario es un gran amigo y nos trata fenomenal cuando vamos. Ya no me hace falta ni siquiera mirar la carta o pedir, porque él ya sabe lo que queremos. Nos dejamos recomendar. Las comidas ahí pueden durar horas y en ocasiones se nos juntan con las cenas. Mi plato favorito es la Flor de calabacín con brandada de bacalao, aunque su especialidad son los arroces.
Alcalá de Henares es muy bonita para recorrerla a pie, mientras vas disfrutando de lugares como la Catedral o la Universidad. Hay muy buen ambiente. Para tomar aperitivos yo recomendaría ir a la calle Libreros, donde está el 'Índalo'. Su propietario, Pepe, ya ha abierto más de ocho restaurantes por todo Madrid que están funcionando genial. Sin duda el éxito son sus tapas bien elaboradas, algunas típicamente andaluzas, aunque tienen mucha variedad y a buenos precios. Para merendar o tomar un buen café recomendaría 'Café Continental', un lugar con encanto y acogedor. Tiene una terraza central con árboles y una decoración bohemia muy bonita. Luego uno puede tomarse un cóctel si quiere pasar más rato y aprovechar la tarde antes de irse a cenar.
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