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¿Puede haber jamones 100 % ibérico sin ser pata negra? Los cerdos de la raza torbiscal estuvieron a punto de extinguirse hace unas décadas en la dehesa de Los Pedroches. A pesar de ser un animal muy productivo, los ganaderos dejaron de criarlo porque había heredado lo que consideraban una tara para un ibérico puro: en su pezuña luce una pequeña franja despigmentada. Sin embargo, Rafael Muñoz, enésima generación de ganaderos, continúa con su cría, como le enseñó su padre, y hoy ofrece sus 100 % ibéricos ‘Mío 1898’ a restaurantes como ‘Nandu Jubany’, ‘Malena’ o ‘Kàran Bistró’.
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