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Vagón-comedor de Canfranc Express

Nuevos Soles 2025: Restaurantes con salas bonitas y de diseño

Las salas que más relucen

20/03/2025 –

Actualizado: 19/03/2025

A través del diseño de los establecimientos que han logrado nuevos Soles Guía Repsol 2025 podemos recorrer todas las tendencias actuales de la decoración, desde la tradición renovada hasta la vanguardia, y todos sin excepción guardan esa necesaria coherencia con el paisaje que les rodea, el pueblo o ciudad en la que se ubican y con la culinaria que ofrecen, para que la experiencia del cliente sea completa.
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La trazabilidad es un objetivo que cumplen muchos de los restaurantes que han sido reconocidos con los nuevos Soles Guía Repsol 2025, desde que al entrar empezamos oliendo los aromas corporativos, disfrutando de los colores y las formas de la decoración y escuchando los sonidos de la música que han elegido cuidadosamente para que nada nos distraiga. Así, todos los sentidos se alineen centrándose en la degustación de los platos, en los sabores que consiguen mezclando los productos de su tierra.

Interior del restaurante Esperit Roca
Los hermanos Roca han ubicado su último restaurante en las montañas de Sants Metges. Foto cedida.

En el campo encontramos restaurantes rodeados de huertas que les proveen de vegetales imposiblemente más frescos, como el 'Espirit Roca' (2 Soles 2025) en San Julià de Ramis (Girona), el último hotel-restaurante de los hermanos Roca entre las montañas de Sants Metges. Un espacio que sublima las vistas infinitas desde un entorno natural que nos inundará de calma, silencio y hospitalidad. El estudio del arquitecto Andreu Carulla ha aportado al proyecto belleza, autenticidad y sostenibilidad, restaurando el castillo, una antigua fortificación militar construida junto al antiguo poblado íbero de Kerunta. El establecimiento, además del hotel, tiene un restaurante gastronómico que ocupa un lugar central en la experiencia y nos sorprende con una destilería, un espacio expositivo, un lounge bar y una bodega bajo la cúpula. Todo ambientado con una decoración actual e integrada en la respetuosa restauración del castillo, donde destacan los materiales naturales que han utilizado.

Comedor de Villa Retiro
En la decoración de 'Villa Retiro' se combina estilos modernista y colonial. Foto cedida.

Otra magnífica restauración, que mezcla los elementos antiguos de una villa señorial de 1892 con las comodidades actuales, es la del hotel Villa Retiro de Tarragona, que aloja una escuela de cocina para profesionales y el restaurante 'Villa Retiro' (2 Soles 2025), con una culinaria que replantea los sabores habituales de las tierras del Ebro. En la decoración del hotel, una mezcla de estilos modernista y colonial, nos topamos de nuevo con esa necesidad por seguir con la tradición constructiva de la zona, pero traída a nuestro tiempo, por lo que han conservado la espectacular escalinata de mármol blanco con una barandilla de hierro forjado, los suelos de mosaico hidráulico, las puertas de madera noble y parte del mobiliario original.

Fachada de La Casa de Manolete Bistró
'La Casa de Manolete Bistró' ocupa un palacete de 1890. Foto cedida.

En La Casa de Manolete Bistró’ (1 Sol en Córdoba) descubriremos también la artesanía, la belleza y el lujo que desde el 2019 han protagonizado la restauración de esta casa de elegancia clásica. Todos los detalles de la decoración están pensados para despertar los sentidos: el olor a flores frescas, el tacto de los manteles y las servilletas de lino y los colores vibrantes de las tierras andaluzas que combinan con los sonidos de la naturaleza que entran por los enormes ventanales que dan a los Jardines de la Agricultura. El chef Juanjo Ruiz, junto a Reme Romero, la directora de sala, son los que han decorado el restaurante y los que lo dirigen y recrean la culinaria en la que vamos a encontrar sabores auténticamente cordobeses. Son también los que relatan a los curiosos la historia del palacete mientras les muestran fotografías de la época, que van desde 1890, cuando lo construye José Ortega y Munilla, escritor y padre de José Ortega y Gasset, hasta su último dueño, el famoso torero Manolete, pasando por la familia dueña de las bodegas Cruz Conde, mecenas del pintor Julio Romero de Torres, al que pagaban por realizar sus obras pero, a cambio, tenía que incluir en sus cuadros la botella de sus finos.

Comedores de La Casa de Manolete Bistró
Dos de los comedores de 'La Casa de Manolete Bistró'. Fotos cedidas.

Un comedor en un vagón de tren

Juan Fernando Santisteban abrió 'La Fabiola' (1 Sol de Cáceres) en 2021, un restaurante con una estructura metálica que recuerda a las naves industriales habitadas, un estilo decorativo iniciado en los años 50 en Nueva York. Para su restauración confió en el estudio Néstor Marcos Architecture, que logró un local lleno de luz y buenas sensaciones, cuidando tanto la decoración visible -las cristaleras, el mobiliario, el suelo de variadas superficies, las columnas y el utillaje- como la decoración invisible -los olores, la música, las texturas-, dando coherencia al concepto que quería transmitir y a la experiencia que propone junto a su sabrosa cocina.

Comedor de La Fabiola
En 'La Fabiola' han apostado por la ambientación industrial. Foto cedida.

También el restaurante 'L’ Aliança d’ Anglès' (2 Soles), en Girona, nos recuerda este estilo industrial con las columnas y la estructura de la planta superior en metal. Un edificio que, desde 1919, funcionaba como sede del sindicato agrícola local, para los payeses y los pescadores del río Ter, con un bar regentado por los abuelos de los dueños actuales, la familia Feliu. El establecimiento sigue guardando su aire decimonónico, reforzado por los detalles vintage, donde podemos disfrutar con la cocina tradicional de Àlex Carrera y con la hospitalidad de Cristina Feliu.

Interior de L'Aliança d' Anglès
Estructura industrial con columnas de metal en 'L'Aliança d' Anglès'. Foto cedida.

Seguimos rastreando el estilo industrial, pero esta vez en una antigua estación ferroviaria de 1915, la que unía en los Pirineos a Francia y España, ahora convertida en el lujoso hotel Canfranc Estación, de la marca Royal Hideaway Hotels & Resorts, por obra de los creativos Andrea Spada y Michele Corbani del Estudio ILMIODESIGN, que se inspiraron en la estética de las antiguas estaciones y de sus lujosos trenes de largo recorrido para conseguir espacios confortables y elegantes, que fusionan elementos art déco con toques nostálgicos de estilo afrancesado. Ambientes donde resaltan materiales nobles como la madera y el latón, tejidos ricos como el terciopelo y una gama cromática inspirada en los años 20 en tonos beiges, grises y verde musgo.

Los dos restaurantes gastronómicos del hotel –'Canfranc Express' (1 Sol) y '1928' (Recomendado) están alojados en dos vagones restaurados de la época. Son vagones originales de tren utilizados hasta el cierre de la estación, en los que han realizado una cuidadosa y artesanal restauración para conservar su esencia. Para llegar a ellos hay que atravesar el hotel por la recepción, donde un gran mostrador, inspirado en las taquillas de las grandes estaciones, nos da la bienvenida. En uno de los vagones-restaurante, con solo tres mesas, el chef Eduardo Salanova plantea un único menú degustación de alta cocina aragonesa, con influencias galas y los mejores productos de la zona.

Vagón de Canfranc Express
El 'Canfranc Express' está ubicado en un vagón de tren antiguo. Foto: Aránzazu Navarro.

Restaurantes alojados en hoteles

Retrocediendo aún más en el tiempo, visitaremos el emblemático Hotel Santa Catalina de Las Palmas de Gran Canaria, inaugurado en 1890, un edificio de aspecto colonial clasificado como “el mejor hotel histórico de lujo de Europa” y donde una vez se alojaron personajes tan ilustres como Winston Churchill, Agatha Christie o el príncipe Carlos de Inglaterra. Su restaurante, 'Poemas by Hermanos Padrón' (2 Soles), ha preservado los tintes neoclásicos del interiorismo, marcado por las tallas de la madera, las molduras de los techos, los colores suaves de las paredes y la obra pictórica de Néstor Martín-Fernández de la Torre. El mobiliario, aunque actual, se integra en la decoración, contribuyendo a ese confort imprescindible de los grandes restaurantes.

Comedor de 'Poemas by Hermanos Padrón'
Tintes neoclásicos en el interior de 'Poemas'. Foto: Rocío Eslava.

También en el restaurante del hotel madrileño Rosewood Villa Magna de Madrid, 'Amós' (1 Sol), encontramos además de los platos del Cantábrico del trisoleado 'Cenador d Amós' de Jesús Sánchez, una decoración con aires clásicos en tonos dorados, con maderas oscuras, detalles de latón envejecido y butacas de terciopelo en tonos tierra, que ha sido diseñada por el interiorista Alejandro Pombo, para convertirlo en uno de los restaurantes de referencia de la capital.

'Donaire' (1 Sol) se encuentra ubicado en la 4ª planta del Hotel GF Victoria Adeje, al sur de la isla de Tenerife. Y la decoración, la ambientación e incluso la música están en sintonía con el hotel, que ocupa un edificio absolutamente moderno en sus materiales, en las formas que reproduce y en el mobiliario que han escogido para hacer la estancia más confortable. Su acristalado comedor se convierte casi en un comensal más de la propuesta del chef Jesús Camacho, que ofrece un menú degustación con mucho criterio, estética pastelera y donde destacan los productos de cercanía, teniendo muy presente a esos pequeños productores de las diferentes islas de Canarias. El servicio de sala va de la mano de Miguel Reyes y la sumiller Paula Rojas, conocedora de las bodegas insulares.

Comedor de Donaire
La luz es un comensal más de 'Donaire'. Foto: Alfredo Cáliz.

Y en Teguise, el pueblo de Lanzarote lleno de casas antiguas refugio de artistas, no se puede dejar de conocer el hotel-boutique 'Palacio Ico'. Fachada encalada, vigas de madera de tea, el pino canario en las balconadas, en el suelo y en las vigas, y sus muros de piedra son protagonistas de una construcción tradicional conejera del siglo XVIII, catalogada como Patrimonio Histórico de la Isla. La decoración de sus nueve habitaciones también es sorprendente, se han restaurado conservando su preciosa arquitectura con materiales naturales y delicadas texturas. En el restaurante 'Palacio Ico' (1 Sol) la estructura de la casona nos envuelve y el mobiliario actual contribuye al confort necesario para degustar los platos creados por el chef Víctor Valverde y presentados en las creaciones de la ceramista Eguzkine Zerain, artista afincada en la isla.

Comer dentro de una cueva

Si preferimos los restaurantes que ahondan en la tradición de siglos, tanto en la decoración como en la cocina, recomendamos 'Casa Cámara' (1 Sol), el más antiguo de Gipuzkoa que ocupa una preciosa casona del siglo XVII en Pasajes de San Juan, a orillas del mar. Un pueblo donde los grandes barcos descargaban su mercancía durante los siglos XVII y XVIII, que apenas ha cambiado su aspecto en los últimos tiempos. El restaurante está regentado por la misma familia desde 1884, sus actuales propietarias, Arantxa y Angelita Uriarte, pertenecen a la cuarta generación y conserva la decoración vasca tradicional en la que destaca un vivero natural de piedra que hay en el centro del comedor, donde se encuentran las jaulas de langostas que se izan por un sistema de poleas. ¡Todo un espectáculo!

Comedor de Casa Cámara
En el centro del comedor de 'Casa Cámara' hay un gran vivero. Foto: Bernart Alberdi.

En La Rioja, cerca de la Cueva de los Cien Pilares en Arnedo, está el restaurante 'Sopitas' (1 Sol), cocina riojana tradicional muy bien hecha y servida en un espacio sorprendente, conformado por una sucesión de 12 cuevas, antiguos lagares de vino que ahora utilizan como botelleros o acogedores reservados, y que desembocan en el comedor principal. Este pueblo llegó a tener en el siglo XIX más de 200 viviendas en cuevas, también utilizadas como cuadras, aljibes, almacenes, lugares de culto... y como bodegas en las que se iba de pendoneo, es decir, de pendón en pendón o estandarte, a elegir el vino para todo el año. Susana Eguizábal es la jefa de cocina y Alberto Eguizábal el sumiller al que le gusta sorprender con los vinos que se hacen en La Rioja oriental.

Comedor de Casa Rubén
Una bóveda de piedra de 1593 acoge a 'Casa Rubén'. Foto: Aránzazu Navarro.

'Casa Rubén' es un restaurante en pleno Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido con vistas panorámicas a los ríos Cinca y Yaga, un entorno privilegiado que ya nos cuenta antes de llegar la culinaria que vamos a saborear, unida a la tierra y a la historia. Así es la cocina del chef Rubén Coronas, sabrosa, rotunda e impregnada de la naturaleza de los Pirineos. Cristina Romero, la directora de sala, domina un comedor que es un espacio único, ubicado bajo una preciosa bóveda de piedra de 1593, en una de las antiguas cuadras de la casona y que produce la sensación de estar en una acogedora cueva en la que el mobiliario no nos distrae de la rusticidad que emana.

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